domingo, 7 de diciembre de 2008

martes, 2 de diciembre de 2008

Estar en las nubes...

Últimamente me he dado cuenta de que me duele la nuca. Había pensado que era de pasarme tantas horas en el ordenador con la tesis, pero el caso es que es un dolor diferente. En el ordenador suelen molestar los hombros y además ya me cuido yo la espalda para que no me vaya a peor que una tiene ya sus añitos. El caso es que este tipo de dolor de nuca, me resultaba familiar... pero no lo ubicaba. Hasta hoy.
Iba en el autobús esta mañana escuchando música, me he dado cuenta de que estaba abandonada a mi último pasatiempo favorito en estos ratos de ocio obligados. En vez de mirar las calles, la gente que va por ellas o cómo conducen (que es para verlo...), estaba totalmente ensimismada mirando las nubes, intentando descifrar su lenguaje. ¿Por qué esa nube tiene esa forma? ¿Por qué esa otra está tan alta? ¿Qué me indica su presencia?... Derrepente he sido consciente que llevo varios meses fijándome compulsivamente en ellas. Y claro, de tanto mirar para arriba... pues la nuca se resiente. Igual que me pasaba cuando iba a observar estrellas,... aunque los malos hábitos no se pierden del todo, y si estoy de viaje por la noche sigo pegándome a la ventanilla del coche para ver quien anda por el barrio.
¿Qué tendrá el cielo que me llama tanto la atención? Siempre he sentido su llamada, tanto que incluso sin abandonar la niñez ya soñaba con surcar los aires... Y es que como dijo Leonardo da Vinci:
"una vez que consigas volar,caminarás por el suelo con la mirada elevada al cielo...porque ya has estado allí,y deseas volver"

El caso es que esto me ha hecho reflexionar y creo que por fin sé que quiero hacer cuando temine la tesis, a parte de tener vida... pero eso, os lo cuento en otro momento.